Nuestras Propuestas Educativas
El estudiante, centro del proceso de aprendizaje
Él es el que construye sus conocimientos en interacción con sus compañeros y profesores, hacia él se dirige los máximos esfuerzos de planificar y ejecutar estrategias de enseñanza pertinentes y coherentes con el logro de los objetivos institucionales.
Formación Integral del alumno
El desarrollo de capacidades cognitivas, como afectivas así como la educación de la voluntad y el espíritu centrada en JESÚS, se dan en un todo, en el estudiante. Propiciar la vivencia de los valores del Reino en el aula y fuera de ella.
Aprender a vivir juntos
Queriendo contrarrestar la tendencia al individualismo a la insensibilidad por el otro, es necesario crear un clima de interculturalidad y equidad de género donde el estudiante sea miembro activo del grupo (escuela, familia, comunidad) es decir que sea capaz y tenga la voluntad de participar y cooperar en las aspiraciones y necesidades del mismo, con una apertura gradual al otro y a sus costumbres y después por medio de su participación directa en proyectos comunes.
Aprender a aprender
Entiéndase aquí la importancia que tiene el desarrollo del pensamiento, incrementando según la edad los instrumentos del conocimiento y las operaciones intelectuales, implica jalonear el desarrollo del pensamiento complejo simultáneamente propiciar la investigación y el análisis crítico de lo investigado, creándose el hábito de estudio en todas y para todas las áreas curriculares, así como la reflexión de los procesos de aprendizaje (metacognición).
Aprendizajes significativos
Implica partir siempre de las experiencias, necesidades y aprendizajes previos de los estudiantes, para luego llevarlos a un nivel mayor y mejor de comprensión y transformación del mundo, la exigencia del maestro entonces es propiciar procesos lógicos y secuenciales en las estrategias de enseñanza y aprendizaje que les permita pasar de la realidad experiencia, saberes previos a la conceptualización, teorización y volver a esta realidad con esta teoría para transformarla.
Proyecto educativo Pentaintegrado
Diseñado para la formación integral de los estudiantes, en sus dimensiones psico-físicas, afectivas, intelectuales, morales y espirituales.